30 de marzo de 2008

I Ruta de la Primavera


Ya en casa y descansado al menos en parte de la ruta de esta mañana, paso a dejar plasmadas mis impresiones sobre la misma.
Llegamos temprano a Dos Hermanas (Sevilla) para tener tiempo de sobra para preparar las bicis y nuestra impedimenta, amen de recoger los dorsales. Una vez listos, pasamos al interior del velódromo para la salida neutralizada de la prueba.
Desde el principio, se vio que no iba a ser un paseo, mientras rodábamos a buena velocidad por las calles del pueblo en dirección a la salida del mismo y al comienzo real de la prueba.
Poco a poco el grupo se fue estirando, cada cual dentro de sus posibilidades, reuniendose solamente en momentos puntuales. Llegamos al primer obstáculo de la ruta, al encontrarnos algo de barro en uno de los caminos, con el consiguiente parón de los que no se ven seguros en ese tipo de terreno y frenazo a los que íbamos tras de ellos y que si pensábamos pasarlo montados. Al final, se formo el consiguiente tapón.
Una vez pasado, llego el primer error de la jornada, una señalizacion que no ven algunos ciclistas y que hacen que gran parte del grupo confunda el camino, haciendo unos kilómetros de mas. Una vez subsanado el error, nuevamente en marcha, a buen ritmo.
En ese momento, me veía bastante bien, tanto en lo anímico como en lo físico, aunque en el kilómetro 35 de la carrera, noto un pinchazo en la cara posterior del muslo, que ya seria mi compañero de fatigas hasta el final de la ruta. A la altura de Bellavista, parada obligatoria en una ambulancia para que me pusieran un poco de linimento. Allí me comentaron que un poco mas adelante, a la altura del hipódromo, tenia una ruta de escape si no me veía con fuerzas para terminar.
Como uno es cabezota al máximo, ni siquiera considere esa opción. Esta ruta la tenia que terminar, fuera como fuera y costara lo que costara. Así que apreté los dientes en la subida y después de un par de bajadas de esas que a todos nos gustan llegue al primer avituallamiento.


Allí volví a encontrar al grupo de compañeros con los que iba antes del percance. Una vez recuperadas las fuerzas, vuelta a la ruta, camino de la universidad, para enlazar con el camino que nos llevaría a la zona de la retama.
Allí nos tenían preparada una sorpresita, cruce del río Guadaira, arenal inmediatamente después de salir del agua y un par de subidas de esas que te destrozan las piernas.

A esas alturas de la película, mi pierna estaba ya a punto de sucumbir, y lo que es peor, estaba arrastrando a la otra. Es entonces cuando se ve la calidad humana del club al que pertenezco. Un compañero, sabedor de que físicamente no estaba del todo bien se queda un poco atrás para acompañarme ya durante el resto del camino que nos quedaba, unos 25 kilómetros hasta la meta.
Su apoyo y ánimos hacen mucho bien y poco a poco van cayendo los kilómetros, y cada vez me siento mas seguro de poder terminar la prueba, aunque la organizacion aun nos tenia reservada una ultima sorpresita: La meta se encontraba en lo mas alto de una subida. Apretamos los dientes para el ultimo esfuerzo y encaramos esa subida con los restos de fuerzas que nos quedaban.
A la mitad de la subida, veo que mi compañero de fatigas pierde tracción, teniendo que echar pie a tierra, mientras ve que lo adelanto. Toda vez que no me gustaba nada entrar en la meta en solitario, después del esfuerzo que el había echo por mi, me bajo de la bici a esperarle y una vez juntos los dos de nuevo, montar ambos y entrar en la meta rueda con rueda, juntos como consideraba que debía de ser.
Desde allí, aun nos quedaban unos kilómetros hasta llegar al punto de salida y con ello al merecido descanso.
Ya reunidos de nuevo todos los componentes del club, reponemos fuerzas mientras esperamos la entrega de trofeos. Hoy ha sido un buen día para nosotros, pues hemos conseguido dos, uno como club mas numeroso y otro para una compañera, como segunda clasificada en su categoría.



No me queda mas que felicitar a los componentes de la organizacion por su trabajo, tanto en la preparación de la prueba, como en todas las facetas de la misma y como no, en lo personal agradecer a la dotación de la ambulancia que me trato, cuyo comportamiento fue exquisito.

29 de marzo de 2008

Mi primera carrera

Por fin llegó el gran día. Mañana participo en mi primera prueba seria, la I ruta de la Primavera en Dos Hermanas y debo de reconocer que me encuentro un poco nervioso. A pesar de que es una prueba no competitiva, la distancia (son 84 kilómetros)y los nervios propios del que se sabe novato en estas lides me tienen un poco preocupado.
Hoy hemos salido unos amigos a rodar un rato y preparar de la mejor manera posible el reto de mañana. Aunque no he podido entrenar todo lo que me hubiera gustado, me he sentido bien. Han sido 45 kilómetros a un ritmo tranquilo, aunque con algunos piques.
Creo que no haré mal papel, pero ya veremos como se da la cosa.
Mañana más, espero que con fotos como es de rigor.

26 de marzo de 2008

Una felicitacion muy especial


Hace días que tenia pendiente escribir esto. Pero bien por el trabajo, bien por la falta de tiempo libre lo iba dejando de lado. Y hoy, considero que es buen momento para ello.
El pasado día 21 de este mes fue el cumpleaños de alguien muy especial para mi, mi esposa. Por ello, estas lineas para transmitirle mi publica felicitación.

8 de marzo de 2008

Puerto de las Palomas


Hoy era el gran día. La segunda subida oficial al Puerto de las Palomas.
La mañana empezó esplendida, un día precioso y soleado, ideal para picar pedales. La compañía y el paisaje también invitaba a ello. Dejamos los coches a unos 4-5 Km de Zahara, con idea de ir calentando antes de afrontar la subida. Los primeros kilómetros caen uno detrás de otro sin demasiadas complicaciones.
Casi a mitad de camino, empiezo a sentirme mal. Un malestar general que va mellando mis fuerzas, hasta que en un momento dado, tengo casi que saltar de la bici para vomitar. La tan temida para los ciclistas pájara, hace mella profundamente en mi. Como buenamente puedo trato de continuar la subida, pero el mal estaba hecho y mi cuerpo no tiraba. A falta de unos 400 metros para el mirador que marca la mitad de la subida aparece Domi, gran compañero y mejor amigo que me acompaña hasta el mirador. Allí mi cuerpo dice basta, por lo que le digo que siga el, que yo volvería al punto de partida y los esperaría allí para no retrasarles demasiado.


Un rato de soledad en el mirador, de tristeza por la derrota y de llanto por la impotencia. En un momento dado, miro hacia arriba, hacia la montaña y "siento" su satisfacción por mi derrota. Eso hace aún más daño en mi ánimo que el malestar físico.
Es justo en ese momento cuando llamo por el móvil a mi esposa, necesitaba escuchar su voz, que me diera ánimos para volver a montar en la bici y tratar de llegar hasta los coches.
La llamada me hace mucho bien, me da ánimos para seguir, para al menos volver con la cabeza alta.



Unas fotos de recuerdo desde el mirador, aunque esa montaña ya la tenga marcada a fuego en mi corazón y poco a poco vuelta al comienzo. Simplemente dejándome llevar por la inercia de la carretera hasta la zona de aparcamientos. Un buen rato después van llegando mis compañeros, con la dureza de la subida y la preocupación por mi estado marcadas en la cara.
Un buen amigo y compañero me ha comentado que eso es algo por lo que pasamos todos, es algo que está unido al ciclismo y que no perdona a nadie, pero en el fondo de mi corazón, hoy sólo me queda un mensaje: Hoy ha ganado la montaña, pero me debe la revancha. Hoy sonríe triunfal, pero mañana la derrotaré.
Como bien dicen, de los malos momentos, se sacan buenas experiencias y te hacen más fuerte.

2 de marzo de 2008

Hace un año


Mas o menos sobre estas fechas el año pasado, nos dimos mi esposa y yo una escapada a París. La verdad es que si no conocéis la ciudad, merece la pena pasar unos días en ella.

La ciudad en si es sencillamente impresionante. La mezcla de estilos arquitectónicos, los monumentos en perfecta armonía con los edificios modernos, sus inmensas avenidas y bulevares, le dan a la ciudad un aire pausado y a la vez de frenética actividad.

Perderse en sus calles es un ejercicio visual que merece la pena. No se dobla una esquina, no se cruza la calle sin tener que dirigir la mirada a uno u otro lado para captar algún detalle, alguna casa, algún monumento que de otra manera quizás se pasarían por alto.

Nosotros nos quedamos enamorados totalmente de la ciudad y de sus gentes y una promesa broto espontáneamente. Volveremos a pisar sus calles.

Veréis cosas que os chocaran bastante, de cara a nuestra forma de ver y vivir la vida. Eso de que los McDonald abran a las siete de la mañana para dar desayunos es bastante peculiar. Así como, ver que a partir de las nueve de la noche casi no hay ningún bar abierto, solamente en la zona donde hay hoteles permanecen hasta mas tarde, por eso del turismo.

En definitiva, una ciudad muy cercana donde merece la pena perderse por unos días.

En mi álbum personal de fotos podéis ver algunas de las que sacamos allí. Espero que os gusten.

1 de marzo de 2008

Vista atras en el tiempo


Aun me parece mentira, cuando echo la vista atrás y me veo a principios del verano pasado. Estrenaba mi primera bicicleta de montaña en condiciones y estaba con la ilusión de volver a recuperar la pasión perdida hacía ya muchos años de las dos ruedas. Desde aquel ya lejano mes de junio hasta el día de la actualidad, han sido muchas rutas, muchos kilómetros, algunos sustos y sobre todo compañerismo y amistad. El mundillo este del mountain bike está plagado de buenos compañeros, de amigos forjados a golpe de biela, compartiendo sufrimientos en las rutas y también grandes logros. Poco a poco se van cumpliendo objetivos, cada vez las rutas duran un poco más en el tiempo y también en las piernas. Pero todo eso merece la pena.
Buscando por la red,
encontré un grupo de personas, que como yo, han hecho de la bicicleta una forma de vida.
Sirvan estas palabras, a modo de sentido homenaje a mis compañeros de rutas y fatigas. A mis compañeros del Club Deportivo
Hispabikers, con los cuales aún me quedan muchas metas por lograr y muchos sueños por cumplir. Juntos lo lograremos.
Hispabikers en el corazón.